Este es un caso típico. Hace varios años creé una cuenta en Facebook motivado por muchas circunstancias, entre ellas una nueva forma de vida en otro país que no era el mío, conocer a personas que antes no conocía, incursionar en mi pasión mayor: el Teatro, comentar sobre lo que experimentaba, reproducir novedades sobre Arte en general, pero particularmente sobre Teatro.
En su momento fué muy útil; cumplió una función. Me vinculó con mucha gente interesante de la que aprendí algo, y otra no tan interesante de la que aprendí lo que no se debe hacer.
Hoy, después de varios años de cientos de publicaciones, algunas de las cuales fueron bien acogidas, otras que pasaron intrascendentes, y las más sin el menor interés para nadie, esta cuenta llega a su fin con más pena que gloria. De momento no se va a eliminar. Queda en espera de una decisión final. Pero al menos, Ivan Leonardo Argudo no publicará las cosas que tanto le gustan ni intercambiará ideas con sus contactos -familiares, amigos, conocidos-. Quizás algo muy trascendental tipo páginas sociales como bodas, divorcios, nacimientos, fallecimientos, quinceañeras, etc.
Si hay alguien que real y sinceramente se interese por mi persona, por mis gustos y actividades, podrán verme en la cuenta de mi primo Emilio De la Serna, quien gentilmente me ha concedido un amplio espacio en la misma. Por supuesto que no será igual, pero Emilio me ha dicho que su cuenta es mi cuenta, a pesar de lo cual no pienso abusar y trataré de ser lo más medido posible.
Resta agradecerles la atención que me han brindado en todos estos años, sus comentarios y memes, sus fotos y "likes". Gracias. Los llevo en un rinconcito de mi corazón. Cúidense y Feliz 2021.
New York, Diciembre 31, 2020
Ivan
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