domingo, 25 de diciembre de 2022

NAVIDAD... para todos?

 


El flujo migratorio que se ha venido dando últimamente a los Estados Unidos, es histórico (y aterrador). Cientos de miles de seres humanos provenientes de diferentes países del Continente acuden en busca de "asilo político". Parecería que tenemos una epidemia de dictaduras feroces que están masacrando a los pueblos, lo que obliga una migración desesperada.

Así pues, este país, caracterizado por su defensa a ultranza de los derechos humanos, casi que ha abierto de par en par sus puertas, (llamémoslas fronteras), permitiendo el ingreso de decenas de miles (o centenas de miles) de aquellos. El paso principal se está dando por el Estado de Texas, el que se caracteriza por tener muy poca simpatía por los migrantes, ocasionando graves problemas a éstos, y muchos dolores de cabeza para el Gobernador y demás autoridades texanas.

Así que, el señor Gobernador, resolvió, muy a su estilo, "exportar" migrantres a los estados y/o ciudades conocidos como "santuarios", entre ellas, Nueva York.


Se calcula que han llegado a la ciudad alrededor de 40,000 migrantes de diferentes países, principalmente venezolanos, haitianos, centro americanos, ecuatorianos, etc., ocasionando un serio problema al señor Alcalde Adams y las oficinas pertinentes como salud y otras.

¿Qué hacer  con semejante cantidad de gente arribada súbitamente a la ciudad? Como se trata de solicitantes de "asilo político", y puede decirse que aprobados por el Gobierno, Nueva York y sus autoridades tienen que vérselas para asilar a los recién llegados y concederles lo que solicitan (o exigen): vivienda, permiso de trabajo, alimentación, seguro de salud, etc.


 

Comprensible todo aquello. Se trata de seres humanos que han venido padeciendo situaciones inenarrables en su larga travesía hasta la ansiada libertad y oportunidades de una nueva y productiva vida.

Las autoridades están haciendo todo lo posible por cumplir, a pesar de lo cual hay quejas y protestas de los migrantes. 

Para complicar las cosas, llegaron las fechas de fin de año en las que la gente está más susceptible que nunca, junto a un clima inclemente que está congelando a los neoyorquinos. Esto aumentó las preocupaciones de Mr. Adams y sus concejales, procurando dar a los recién llegados algo de alivio en esta Navidad.

Se dice que en Estados Unidos hay algo más de once millones de inmigrantes indocumentados, quienes viven en este país por muchos años, "en la oscuridad", sin ninguna clase de derechos ni oportunidades para progresar. No se sabe con exactitud cuántos de ellos viven en Nueva York, pero estudios de la Fundación Warren hablan de unos 460,000 a la fecha.

Si bien es cierto que el Estado de Nueva York ha creado muchos programas de ayuda a los indocumentados, especialmente en salud y educación, también es verdad que no existe posibilidad alguna de otorgarles la regularización, o al menos, permisos de trabajo, ya que esta es competencia del Gobierno Federal. Y por tanto, hay gente que ha vivido aquí cinco, diez, quince, y hasta veinte años sin esperanza de obtener "papeles". Así que, la Navidad que se desea dar a los recién llegados, ni por asomo les llegará a los que tienen tantos años viviendo aquí.

Nueva York, Diciembre 25, 2022

Leonardo (Ivan) Argudo
 


sábado, 3 de diciembre de 2022

Aniversario 32

 Cómo pasa el tiempo! No usaré el lugar común de "parece que fué ayer", porque no es así. 32 años son 32 años, y eso es toda una vida.


Ante el Altar. Gastón y Cecill, y Ruysdael, portador de Aros. Los Novios.
 
Hoy, hace 32 años, un lunes 3 de diciembre de 1990, en la Iglesia de La Merced de Portoviejo, Manabí, uníamos nuestras vidas para siempre, más allá de la vida y la muerte. 

Fué una inolvidable Ceremonia religiosa a la que asistió toda la familia de Nilita, pues era su tierra, esa maravillosa tierra manabita de la que son dignos hijos. Estuvieron también amigas de Nilita que viajaron desde Guayaquil, y mis primos Rosa Moreno y Gastón Sotomayor, hoy tristemente descansando los dos en la Paz eterna, y nuestra muy querida Cecill Villar que fué mi madrina de Boda.

Nilita y yo con las bellas sobrinas Vanesa, Elguita y Karina, Damas de Honor.

 La recepción fué en casa de mi cuñada Ruchita Murillo, donde la pasamos muy bien, en un derroche de alegría familiar y gran camaradería. Había sido recibido con sumo agrado por la familia, a la que me integraba feliz y contento. Todos lo pasamos muy bien, los de casa y los de afuera, y la diversión duró hasta la madrugada.

Saliendo en medio de una lluvia de arroz.


Foto del recuerdo.


Con mi madre política, Rosita Toa Farfan de Murillo (+)


Rigna Ramírez, grande amiga a quien amamos profundamente, hoy en la Paz eterna.


Fué una jornada inolvidable que llevaremos siempre en nuestro corazón, y que dió inicio a la formación de un hogar que sería para siempre, con penas y alegrías, buenos y malos momentos, tiempos de felicidad y de tristeza, pero que siempre nos impulsaron a seguir adelante, sin claudicaciones ni renuncias a luchar juntos ante el mundo y por nuestra unión indestructible.

Y aquí estamos: 32 años después, lejos de nuestro país, sin dejarnos vencer por la adversidad, dispuestos a resistir ante todo, y prestos a pasar bellos momentos, solos o en la grata compañía de gente linda que hemos conocido y nos brindan su cariño y respeto.

Gracias a la vida por tanto y por todo.

New York, diciembre 3, 2022

Leonardo Argudo (IVAN).

EIGHT YEARS NOW, MY BELOVED NILITA

  Hospital staff celebrated Nilita's birthday on April 28, 2016  Eight years have already passed. Eight years! You were about to say goo...